Principios básicos y definiciones
Al explorar la relación entre música y salud es necesario aclarar el punto de partida: la definición de qué entendemos por salud, desde qué aproximación entendemos la música en este contexto y a qué nos referimos cuando hablamos de bienestar.
SALUD
Según la definición que estableció la Organización Mundial de la Salud en 1948: «La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades».
Desde Cultura en Vena compartimos esta visión holística de la salud, que incluye la vertiente psicosocial impregnando todos los ámbitos de la vida. Hasta ahora la medicina quizá ha estado demasiado centrada en la medicina farmacológica y en las tecnologías —por supuesto tan necesarias para salvar vidas— pero dejando en un segundo plano todo lo que el arte y la cultura nos pueden ofrecer. La asistencia sanitaria estará incompleta si no invertimos esfuerzos y recursos también en ese otro plato de la balanza: es necesario un soporte complementario que nutra esas carencias del sistema. La cultura puede suponer un bisturí emocional excelente para completarlas, y las prácticas artísticas en entornos sanitarios, un tratamiento coadyuvante a los tratamientos convencionales.
Cuando se habla de cómo la música afecta al ser humano en la salud, el mecanismo fisiológico por el que esta ejerce su beneficio es directamente a través del sistema nervioso central, así lo describen numerosas referencias científicas22.
MUSICOTERAPIA
Se define como «el uso profesional de música y sus elementos (sonido, ritmo, melodía, armonía) como una intervención en ambientes médicos, educativos y cotidianos con individuos, grupos, familias o comunidades buscando optimizar su calidad de vida, y mejorar su salud físico, social, comunicativo, emocional e intelectual y su bienestar. La investigación, la práctica, la educación y la instrucción clínica en la musicoterapia se basan en estándares profesionales según contextos culturales, sociales y políticos», según la Federación Mundial de Musicoterapia (2011). En ocasiones se confunde la musicoterapia con la educación musical, lo que sería equivalente a confundir a un musicoterapeuta con un profesor de música. En la musicoterapia los objetivos son individuales y particulares, con un fin terapéutico, mientras que, en la educación musical, la música es un fin en sí mismo.
Aunque el Proyecto MIR comparte muchos de los objetivos de la musicoterapia y, como esta, también se nutre de los beneficios de la música como herramienta terapéutica, los procesos y recursos no son los mismos. En resumen, el Proyecto MIR no emplea la musicoterapia puesto que no está realizado por musicoterapeutas, sino que pretende probar la potencia terapéutica de la música en directo a cargo de músicos profesionales.
EDUCACIÓN MUSICAL
A cargo de un/a profesor/a, la educación musical se propone capacitar a su alumnado para el desarrollo de sus capacidades musicales. La educación musical tiene unos contenidos que pueden recogerse en un currículo, y aspira a unos objetivos artísticos universales basados en la belleza de la música en sí misma, en el arte de la música.
INTERVENCIONES BASADAS EN LA MÚSICA
Se refiere a todos los protocolos experimentales que usan la música en diferentes formas para poder estudiar sus efectos terapéuticos. Existen diferentes tipos de intervenciones musicales que se pueden llevar a cabo con el paciente y que se clasifican bajo diferentes términos23. Algunos de ellos son:
Música médica: Intervenciones basadas en música realizadas por un profesional sanitario, buscando el tener un fin de promoción de la salud, pero sin existir en ocasiones de manera definida este mismo ni tampoco una interacción recíproca como sucede en la musicoterapia.
Estimulación rítmica auditiva: Técnica de terapia con música que se basa en la rehabilitación de movimientos que son de cadencia rítmica naturalmente, como la deambulación, de manera que una serie de estímulos auditivos rítmicos son la base para acompasar y sincronizar esos movimientos a rehabilitar.
Terapia física basada en música (producción musical): Consiste en una variante de terapia física en la que los pacientes con algún déficit motor trabajan la recuperación de esos déficits por medio de la interpretación y uso de algún instrumento musical.
Terapia de entonación melódica (MIT): Es una técnica de intervención en pacientes con afasia no fluente en la que se asigna a sílabas una entonación concreta, de manera que comenzando por dos sílabas hasta llegar a frases, con una entonación lenta y concreta de inicio, se busca el recuperar la fluencia y los bloqueos del lenguaje del paciente afecto por un trastorno cortical del lenguaje (ictus, procesos neuroquirúrgicos, trastornos neurodegenerativos con afasia…)
Intervenciones musicales en hospitales: Se trata de interpretaciones de música en directo en un entorno hospitalario, ofrecidas por un músico profesional.
MÚSICO INTERNO RESIDENTE
El MIR (Músico Interno Residente) es un músico profesional de alto nivel integrado perfectamente en la plantilla del hospital para realizar intervenciones musicales a pie de cama. Sus microconciertos se dirigen a pacientes concretos, que reúnen los criterios marcados por cada servicio hospitalario y son susceptibles de mejorar su bienestar gracias a la música en directo. El MIR debe reunir unas cualidades específicas, tanto artísticas como personales.