Algo aparentemente tan sutil como la música es, a la vez, tan poderoso que nos afecta íntegramente en todas nuestras dimensiones: fisiológica, emocional, mental, social y espiritual. Esa “magia” es la que la neurociencia poco a poco va descubriendo.
Algo aparentemente tan sutil como la música es, a la vez, tan poderoso que nos afecta íntegramente en todas nuestras dimensiones: fisiológica, emocional, mental, social y espiritual. Esa “magia” es la que la neurociencia poco a poco va descubriendo.