Autor: Nahuel, 9 años
Escrito en el Aula Hospitalaria del Hospital Universitario Marqués de Valdecilla (Santander)
Emociones que encontrarás en este cuento: alegría
Un día mi papá entró en casa todo contento, porque se había encontrado un gato en casa.
Me lo enseñó y era guapísimo y papá dijo que nos lo podíamos quedar, pero yo le dije que ese gato era de la vecina y que se lo teníamos que devolver.
Papá dijo que nos lo podíamos quedar, pero yo le dije que ese gato era de la vecina y que se lo teníamos que devolver.
Yo me puse triste porque siempre quise tener una mascota, pero mi papá dijo que tenía razón y que lo teníamos que llevar.
Se lo llevamos a la vecina y nos dijo que muchas gracias.
Mi papá me preguntó que por qué sabía que era suyo y yo le contesté que pasaba por aquí todos los días al cole y le acariciaba todos los días.
Así que aunque no tengo gato lo veo todos los días y me siento feliz.